El mejor gestor de la salud I.

Corria mediados del año 2008, para mi estar de pie era un autentico suplicio, tenia algo en la parte inferior del pie izquierdo, fui remitido al especialista del reuma porque se había detectado también un principio de artrosis.

Mediante una placa de rayos X se pudo detectar que tenia un espolón calcaneo, es decir, un crecimiento óseo sobre el hueso del talón que en momentos determinados, especialmente después de una jornada laboral de 16 horas, trabaja en un salon de banquetes los fines de semana, era una tortura indecible.

Para la artrosis la especialista me receto el Condrosan, con las siguientes indicaciones : tomar tres meses y descansar un mes y comenzar un nuevo ciclo.

Ante mi interrogante por la forma tan inusual del tratamiento, ella me explico que se debía a los efectos altamente toxicos de dicha "medicina"

Para el espolón me indico una plantilla con un hueco justo en la parte de dicho espolón de tal forma que quedara en el "aire" por así decirlo, así se evitaría que no me causara molestias al no tocar  el área afectada.

Bueno, pues empece el tratamiento del Condrosan, pero un gusanillo se habia metido en mi cabeza, la plantilla hice varios intentos por tomarme la medida, pero todos mis intentos con la ortopedia que estaba en el centro del pueblo fueron inutiles y me daba pereza ir hasta la otra que estaba localizada bastante lejos, al final esta es la única que existe, me imagino que los costos de estar tan en el centro le pasaron factura y termino bajando la persiana para nunca mais.

Pasaron los 4 meses y tenia que comenzar con un nuevo ciclo del dichoso Condrosan, cuando un buen día navegando por la red encontre la página de Nestor Palmetti , los criterios ahí expuestos me indicaron que uno debía y podía tomar las riendas de la salud en sus manos.

Entre las páginas recomendadas por Palmetti estaba el Blog de la Limpieza de Hígado, la cual como podéis ver  incluyo en la portada, así llegue hasta dicha página, entre pitos y flautas a principios de Enero del 2009, lleve a cabo mi primera limpieza de Hígado, a todo esto ya me había olvidado del Condrosan ni que decir de la plantilla para el espolón.


A la sazón estaba tomando más de 8 clases distintas de pastillas, incluido un protector estomacal, Omeoprazol, que es lo peor que se puede tomar, pero lo recetan con una fácilidad pasmosa, otras para el dolor, en fin que tenia una cartilla de enfermo crónico, cosa que me molestaba  hasta lo indecible.

A partir de la primera limpieza de Hígado, me di cuenta de que algo había pasado en mi organismo y que sus beneficios eran de un claro efecto positivo hacia mi salud, no se en que momento suspendi la ingesta de todas las ocho clases de pastilla, tampoco se en que momento, puesto que no me di cuenta, el dolor que me acompañaba al caminar desaparecio sin dejar rastro alguno, a fines del 2009 volvi a la consulta de la especialista y al examinar la nueva radiografía del espolón fue grande sus sorpresa al ver que no había el menor rastro de dicho espolón, me comento que habia sido un error en la radiografía anterior.

En relación al Condrosan, le menti y le dije que lo continuaba tomando, me dijo que continuara así, que me veia en forma estupenda, que la analítica mostraba unos resultados insuperables, yo que me partia de la risa, pensando que de no haber tomado la decisión de apartarme de dichos medicamentos quien sabe Dios como hubiera estado a esas alturas.

Esa fue la última vez que visite un médico y fue ahí cuando me di cuenta de que el mejor gestor de la salud era uno mismo.